Una de las prioridades de Amica es avanzar en el desarrollo de nuevas metodologías que contribuyan al desarrollo personal, profesional y sociales de todas las personas. Por esta razón, desde hace aproximadamente 2 años, varios profesionales de la entidad están recibiendo formación y profundizando en la metodología Outdoor Learning (OL) como herramienta para potenciar las habilidades de cada persona, independientemente de sus necesidades de apoyo, a través de sus objetivos de vida.

Recientemente, el grupo de trabajo que está liderando esta línea de trabajo ha llevado a cabo algunas acciones haciendo uso de esta metodología:

El pasado viernes 21 de Julio, el grupo de formación de Reinosa acudió a una de las primeras experiencias realizadas con la metodología Outdoor learning. Durante la jornada, se realizaron varias actividades con el objetivo principal de identificar y saber gestionar nuestras emociones. Para ello, se utilizaron técnicas de mindfulness y el entorno natural como facilitadores para el aprendizaje.

Los días 31 de julio y 1 de agosto, un grupo de 4 jóvenes y 2 formadores han vivido una gran aventura en plena naturaleza, en esta ocasión, con el objetivo de mejorar sus habilidades para la buena convivencia y el trabajo en equipo.

Para llevar a cabo esta misión, el grupo ha realizado una experiencia de inmersión de aprendizaje en un precioso Valle de Cabuérniga en Cantabria. Sin contacto con la civilización y la tecnología, los participantes han llevado a cabo múltiples actividades basadas en la reflexión personal, la resolución de problemas, la creatividad, la cooperación, la atención plena y la supervivencia siendo capaces de poner en valor todas sus capacidades y descubrir nuevos aspectos de sí mismos, mostrando un alto nivel de motivación y predisposición para avanzar en sus objetivos personales.

Así mismo, durante el mes de julio, se han llevado a cabo diferentes talleres de aproximación y conexión con el medio natural: Preparación de mochila para experiencia en la naturaleza, montaje de tienda de campaña y consejos útiles para dormir en el bosque; prácticas de atención plena, encuestas para recopilar información sobre el nivel de conexión con la naturaleza e interés por participar en este tipo de acciones, sesiones de apoyo personal…

Como resultado de estas experiencias, cabe destacar el alto impacto que la naturaleza tiene en las personas a nivel físico, cognitivo y social. Las oportunidades de desarrollo y aprendizaje aumentan significativamente, así como las ganas de superarse y darlo mejor de uno mismo. Por esta razón, otro de los grandes objetivos que perseguimos a través de esta acción es generar mayores oportunidades para las personas con menos oportunidades o más necesidades de apoyo de ¡“vivir” la naturaleza realizando un viaje de aprendizaje y desarrollo!