Cuando abrimos el centro de día Sotileza en 1999 comenzamos a leer el periódico todos los días para mantenernos informados de todo lo que pasaba a nuestro alrededor. En esta actividad participaba un pequeño número de personas. En seguida nos dimos cuenta de que casi nadie sentía mucho interés por las noticias. Se sentían ajenos a la sociedad. Los profesionales insistíamos en que no, en que tenían que conocer lo que pasaba a su alrededor y que formaban parte de la comunidad igual que el resto del mundo y podían aportar muchas cosas. Poco a poco empezaron a interesarse por las noticias locales, que a veces afectaban a su vida diaria. Para cuando un tiempo después se valoró cancelar la suscripción al periódico ya nadie quería dejar de leerlo cada día y a menudo se preocupaban por ver el telediario en sus casas y estar atentos para contarnos algo que les había llamado la atención.
Hacía tiempo se habían puesto en marcha otras iniciativas muy interesantes, como un periódico en papel en el centro La Vega o varios blogs, que nos obligaban a mantenernos informados y a desarrollar contenidos y servían también para estar en contacto con otras personas.
Como queríamos explorar algo nuevo empezamos a grabar una especie de telediario con la idea de seleccionar y preparar una noticia semanalmente, sobre todo si el día de ocio llovía y no podíamos salir, como actividad alternativa. Así que empezamos a estar atentos a ver si alguna noticia era interesante para contarla nosotros después. Empezó a gustar mucho la actividad porque después de terminar la grabación lo veíamos todos juntos y nos hacía mucha gracia vernos en la tele.
Lo distribuíamos entre personas usuarias, familias y profesionales y luego siempre había alguien que mandaba algún comentario o nos llamaba para decir que nos había visto. Poco a poco se fueron incorporando más personas aunque no participaran en el grupo de las noticias y mejoramos el formato para que se viera bien en los móviles.
En seguida le empezamos a dar un toque particular, “nuestra propia versión”, y exploramos ese camino buscando desarrollar la creatividad y creando nuestros propios temas, que ya no necesariamente eran noticias. Lo hemos ido abriendo a la participación de personas de otros centros, otros profesionales, familiares, amigos y vecinos del barrio, y así muchas personas han ido (y cada vez más) aportando cosas muy interesantes, con lo cual se ha ido enriqueciendo mucho.
Al igual que las videoconferencias que ya hacíamos antes el noticiario sirve para mantenernos en contacto con las personas que se quedaban algún día en casa por estar enfermas o con las que iban a otros centros, y poco a poco fuimos ampliando el grupo de personas suscritas a la lista del correo y algunas familias nos decían que lo veían el fin de semana en casa y que lo esperaban siempre con impaciencia.
Antes de la cuarentena llevábamos grabados 103 programas y al empezar el confinamiento se nos ocurrió hacer uno al día para mantener el contacto entre todas las personas usuarias (las que están en sus casa y las que están en los alojamientos), familiares y profesionales. Se van recogiendo aportaciones durante todo el día y lo vamos editando, de forma que cada noche sale el programa diario.
En cuanto a la técnica, se graba con teléfonos móviles y se edita con Openshot (vídeo) y Audacity (sonido), que son herramientas muy accesibles a cualquier persona. Cualquiera puede participar enviando sus aportaciones y luego se puede ver en cualquier ordenador, móvil o tablet.
A partir de ahora la idea es hacer un resumen semanal. Y que se pueda disfrutar por todas las personas que accedéis a nuestra web o redes.
Os dejamos con el resumen de la primera semana, y en breve estrenaremos la segunda semana.
Esperamos os guste tanto como a nosotros y disfrutéis viéndolo tanto como todas la personas que hacemos nuestro “Amica Ñus”