Recientemente, grupos de Amica han participado en diversas experiencias de Outdoor Learning con actividades diseñadas para desarrollar su capacidad de esfuerzo y apreciar el trabajo en el campo, todo en un entorno que promueve la conexión con la naturaleza.
La primera expedición fue en el Valle de Liébana, donde las personas participantes superaron retos de supervivencia y dinámicas de grupo en sus rutas por los Picos de Europa, fomentando así el empoderamiento personal.
Poco después, volvimos a la acción en el Valle de Cabuérniga. Allí, durante 3 días y 2 noches, el equipo se sumergió en la vida de los foramontanos, aprendiendo su espíritu de cooperación y supervivencia. Además del trabajo grupal, cada participante se centró en sus objetivos personales, aprovechando al máximo esta experiencia en plena naturaleza.
Y, por último, siete personas participantes disfrutaron de una enriquecedora experiencia de Outdoor Learning en el Campus Diversia, con el objetivo grupal de esta expedición de desarrollar la capacidad de esfuerzo y valorar el trabajo en el campo, en un entorno que nos reconecta con lo esencial.
Durante tres días, los participantes se dedicaron a actividades centradas en el bienestar natural, la supervivencia, la adaptación al entorno y la interpretación del medio ambiente. Trabajaron mano a mano con el equipo del Campus Diversia en tareas clave como la cosecha de lavandín, el cultivo en la huerta y el aprendizaje del uso de herramientas agrícolas y forestales, siguiendo siempre estrictos protocolos de seguridad.
Esta experiencia no fue sólo una importante lección sobre el esfuerzo y la cooperación, sino que también favoreció un retorno a lo esencial, a vivir sin las comodidades habituales. Y es que, una vez en el campamento del Campus Diversia y desconectados de la tecnología, los participantes reinstauraron hábitos saludables y mejoraron su tranquilidad mental, disfrutando de un entorno natural que favorece la reflexión y el crecimiento personal.